Las condiciones de cultivo son más exigentes para el sector de la agricultura en las montañas del Jura que en la zona del valle.” concluyeron los granjeros en la parte occidental del Jura bernés al darse cuenta. Sus viejos y estrechos establos para las vacas lecheras ya no estaban actualizados y requerían inversión. Sin embargo, el tamaño de la granja con la base de forraje existente era demasiado pequeño para una expansión que valiera la pena. Además, debido a la topografía y el clima, la tierra existente no era la más adecuada para mantener vacas. Se encontró una alternativa adecuada en la conversión a la cría de cabras lecheras. El consumo de productos lácteos de cabra está aumentando y recientemente ha mostrado una fuerte demanda en un segmento del mercado. Los agricultores que invierten en la cría de cabras son pioneros. Esto significa que hay poca documentación para las conversiones estructurales en este sector. Es difícil calcular una conversión que además implica cierto riesgo. Al final, los costos totales del cambio fueron más altos y consumieron todos los ahorros. Las condiciones climáticas extremadamente malas del verano pasado provocaron dolorosas pérdidas de rendimiento en el forraje. La necesidad resultante de comprar alimentos para animales adicionales planteó una seria amenaza para la existencia de la granja.

Transición costosa

En el caso de las nuevas formas de producción, los primeros en arriesgarse a dar ese paso siempre están cargados con el llamado «trabajo pionero». Esto significa que tienen que adquirir todos los conocimientos sobre la agricultura, las edificaciones y el equipo técnico por sí mismos. Al hacerlo, deben cumplir con los requisitos legales, que generalmente se basan en principios teóricos más que en prácticos. Esto no simplifica la implementación, sino que la encarece. Asimismo, los planificadores y constructores de establos carecen de experiencia y no tienen cifras comparativas correspondientes. Por lo tanto, incluso con cálculos cautelosos con márgenes de seguridad, los costos de transición pueden resultar más altos, y los límites financieros pueden estirarse demasiado.

Hacer el uso correcto de los recursos regionales

Esta región, con su clima más bien duro y tierras poco profundas y en su mayoría empinadas, ofrece solo una base de forraje apenas promedio. La pendiente predominantemente empinada es poco adecuada para el pastoreo de ganado. Por lo tanto, las cabras se adaptan mucho mejor a este terreno y causan mucho menos daño a la capa de pasto. Si los agricultores no adaptan el manejo del ganado, el impacto en esta área sería enorme. Además de la pérdida de las bases de producción de alimentos saludables y sostenibles, la destrucción de la región se volvería excesiva. Con los ya escasos recursos propios de Suiza, estas áreas utilizables deben preservarse a toda costa.

Financiación

Integrantes del equipo de Fundación Suyana visitaron a esta familia campesina innovadora, trabajadora y motivada. Con el apoyo de Suyana, son capaces de superar los momentos difíciles y desafiantes. Ahora tienen de nuevo un medio de vida sostenible y sólido y, por lo tanto, tienen un futuro seguro por delante.